La poética exacerbada de los futuristas reconoció en la velocidad el signo de su tiempo. El automóvil, el artefacto cuya belleza concibieron superior a la de la Victoria de Samotracia, fue uno de los transformadores cruciales del paisaje del mundo en la era industrial. La revolución provocada por su invención modificó completamente la vida del individuo del siglo XX, obligando a arquitectos y urbanistas a repensar y reacondicionar edificios y ciudades…. >>>