Buenos Aires / Argentina

inicio especiales sugerir noticia links newsletter  

Ocasiones aprovechadas / Fredy Massad y Alicia Guerrero Yeste [13/09/09]

archivo >>>

Reflexiones acerca de las posibilidades de significados que la palabra 'ocasión', dentro de una cita de Aldo Van Eyck, hace resonar para Josep Lluís Mateo (Barcelona, 1949) son el preámbulo con que este arquitecto abre Ocasiones (editado por ACTAR), el libro donde conversaciones, reflexiones y proyectos desarrollados durante los últimos cinco años como hechos y acciones son interpretados desde ese concepto que puede ser el contenedor de la infinitud de formas individuales de contacto y ejercicio de acción sobre la realidad.

Ocasiones es un recorrido reflexivo por esa trayectoria, posterior a la realización del Centro Internacional de Convenciones de Barcelona para el Forum 2004, que ha sido elaborado por Mateo con material recopilado por él mismo durante dos años: entrevistas, extractos de ponencias, conversaciones, respuestas al auditorio de una conferencia… tratando a través de él de 'hacer una crónica de lo que hoy alrededor del proyecto; el modo de producir y entender las obra; cómo se relaciona el pensar y el hacer, y el abandonar un proyecto'.

En esa adopción del término 'ocasiones' como un símbolo bajo el que resumir la producción de este período reciente parece subyacer el hecho de una identificación, la culminación de un pleno reconocimiento en ese significado posible de la ocasión como síntesis de la propia predisposición, actitud y acción ante una circunstancia confrontada de la posición desde la que define y entiende el hecho de hacer arquitectura, algo que ha definido como una forma de responder activa y creativamente a la complejidad vital del mundo real, como una contrafuerza que debe situar a los objetos en un lugar específico, en un momento determinado y en un contexto único.

Josep Lluís Mateo es un personaje en singular que - pese a su reconocimiento y posición en la elite arquitectónica- se mueve deliberadamente con una cierta conciencia de outsider. Tal vez porque su reconocimiento se gestó sobretodo ligado a su actividad como editor entre 1981 y 1990 de Quaderns d’Arquitectura i Urbanisme, la revista del Colegio de Arquitectos de Cataluña, Mateo haya sido equívocamente asumido como un arquitecto más comprometido en lo teórico que en lo pragmático cuando en realidad su trabajo actual deba necesariamente comprenderse como el resultado de su decisión de 'aferrarse a ejercer estrictamente como arquitecto'. Ocasiones es sin duda un ejercicio, un eslabón crucial en el proceso constante de pensamiento y acción que es la arquitectura e identidad intelectual de Mateo, un retrato de un estado de situación mental, con el que Mateo corrobora ese aferramiento, la afirmación de que es la dimensión más estrictamente pragmática de la arquitectura la materia para la reflexión: 'en la práctica de la arquitectura las ideas se producen y se encuentran en la acción. - escribe al inicio del libro.- No son principios previos (nos interesa mirar libremente), no son justificaciones, ni análisis a posteriori'.

En los textos del libro vibra el carácter directo de las opiniones, la intensidad con que Mateo dialoga junto a sus interlocutores, la proximidad buscada y deseada como necesaria. En el tiempo en el que algunos de sus coetáneos han quedado congelados ideológicamente y a veces cómodamente ajenos a cuestiones que definen el estado vital de la arquitectura en el momento contemporáneo, Mateo sigue demostrándose como un personaje inquieto, consciente y posicionado a través de su propia obra y conocimiento crítico en debates como el de la sobresaturación icónica, lo local y lo global y los riesgos de la macdonalización de la arquitectura, la esencialidad tectónica frente a la arquitectura de maquillaje, cómo articular la relación teoría-práctica y los contextos arquitectónicos europeo y estadounidense (que debate junto a Stan Allen), aspectos del proyecto Sociópolis (conversado junto a Vicente Guallart). Resulta sin duda especialmente enriquecedora la conversación que mantiene con el cineasta José Luís Guerín, propiciada por Mateo para conocer su opinión sobre su edificio para la nueva sede de la Filmoteca de Cataluña. En ella, Guerín habla más como cinéfilo que como cineasta, llevando a una conversación en donde emerge la fusión entre realidad y poética que puede tejerse a través de la arquitectura.

Ésta y sus reflexiones acerca de los proyectos realizados para dos concursos perdidos (el concurso para la reestructuración de la Plaza Skanderbeg en Tirana (Albania) y el concurso para el nuevo Camp Nou en Barcelona, donde arremete contra la debilidad del cosmético proyecto de Norman Foster frente al concepto de su propia propuesta) sean gestos en los que conviene reconocer el instinto del crítico, hablando con una sinceridad que resulta inusual y transgresora en un presente en que arquitectos de su calibre delatan a una actitud de indiferencia respecto a la responsabilidad en el estado de la arquitectura en su tiempo, así como la dimensión íntima y emocional que implica la realización de un proyecto, y en oposición a la cual se descubre esa confesión de la naturaleza de los vínculos que Mateo establece con el proyecto y su lugar, la dualidad entre la cercanía y la lejanía con que el arquitecto experimenta la ocasión de cada proyecto.

Es reflejo también de este estado de situación mental el concepto de Occasional City, la instalación presentada en la librería-galería RAS de Barcelona. En ella, Mateo desea mostrar 'una parte del material físico que existe en torno a los proyectos' creando una mediante maquetas (completas, inacabadas, a diferentes escalas), fotografía, papel, proyecciones…, una ciudad ideal , global y local, compuesta con orden y jerarquía , integrada por los fragmentos de las ciudades en las cuales su estudio ha desarrollado algún tipo de propuesta de intervención. La noción de la 'ocasión' se percibe en el carácter marcadamente efímero de la que Mateo ha querido revestirla, evitando dotar a esa muestra de fragmentos de trabajo de ningún aura museográfica, enfatizando su sustancia como tales y buscando evitando impostar una mistificación sobre ellas o sobre el propio ejercicio de pensamiento del que emergen, contraponiendo para ello al 'tumulto de objetos e ideas' el efecto del sonido el sonido de videomontajes de las obras de los tres edificios que Mateo tiene actualmente en construcción (la Filmoteca de Cataluña en Barcelona y dos edificios de oficinas, uno en Zeist (Holanda) y otro en París).

Aunque realizado desde una aproximación específica y eminentemente personal, al afirmar que desea que Ocasiones no sea percibido como 'un trabajo excesivamente autobiográfico o introspectivo, sino como algo que pretende interaccionar con el exterior', Mateo da a entender la clave crucial de este trabajo: analizar, desde las realidades de su trabajo particular, el estado de las problemáticas y situaciones contemporáneas de la arquitectura. Articular desde el conocimiento de ser la capacidad y los modos para intervenir.

 

Fredy Massad y Alicia Guerrero Yeste

Publicado en ABCD las Artes y las Letras - Número 913

 

 

diseño y selección de contenidos >> Arq. A. Arcuri